Industry Facts: Do Fashion Seasons Still Exist?
¿Qué ha pasado con el reloj tradicional de la moda, ahora que las temporadas se han multiplicado y las redes han sobrepasado los niveles de innovación?
A lo largo del siglo XX con la creciente producción en masa de prendas de vestir, las tendencias mantuvieron sus ciclos de vida relativamente largos y predecibles. Cada temporada, las casas de pronósticos de moda lanzaban libros pesados que contenían sus predicciones sobre qué estilos y telas entrarían en las temporadas futuras.
Hoy en día, las redes sociales dictan tendencias en segundos y desaparecen de la misma manera. Las tendencias nacen y mueren en un entorno infinitamente más rápido y turbulento, en el que marcas, celebridades, revistas, bloggers y consumidores finales en las redes sociales se disputan influencia sobre lo que está dentro y fuera de la moda.
Por supuesto que existen casos en los que la red ha enaltecido por temporadas un mismo estilo, como el neobarro de Allesandro Michele para Gucci que en gran medida es una tendencia de las redes sociales, donde los bloggers han hecho que se mantenga en la cima de las marcas de lujo.
Debido a esta inestabilidad de predecir tendencias, grandes agencias de Coolhunting han optado por asesorar a sus clientes en enfocarse en no vender el producto de la temporada; lo más importante está en trabajar en su identidad de marca, quién ficoes y cómo se diferencia de sus competidores. Las tendencias ahora soen vistas más como herramientas que pueden ayudar a convencer a los consumidores de cómo la marca entiende e interpreta el cambio del mundo. Las marcas recurren a los analistas de tendencias para rastrear esta sobrecarga de información y encontrar las tendencias que funcionarán para su marca, que tienen poder de permanencia y que pueden aprovecharse en mercados específicos.
Cada marca usa los análisis de tendencias para cada etapa del ciclo de vida de sus productos. Desde diseñadores que analizan qué colores se han comportado mejor en el comercio minorista, o hasta as formas de comprar y comercializar, donde el análisis de tendencias forma una parte crítica de cada decisión sobre precios, profundidad de compra, tiempo dentro de una temporada y reabastecimiento.