6 profesiones que puedes desarrollar en la industria de la moda
Trabajar en la moda no solo implica diseñar ropa. En realidad, el campo laboral dentro de la industria de la moda es tan extenso como en cualquier otra área. Sí a ti te apasiona la moda, pero no te gusta dibujar, patronar o confeccionar prendas, no te sientas mal, hay un sinfín de opciones dentro de esta gran industria en las que te puedes desarrollar para forjar una carrera competitiva trabajando en lo que tanto te gusta.
Primero que nada debes saber que, aunque todos los trabajos en moda tienen su lado glamouroso, eso es sólo la cereza del pastel pues existen muchas actividades que requieren desvelos, sudor, estrés y claro dosis altas de creatividad como en cualquier otra profesión, pero si esto es realmente lo que te apasiona entenderás los retos como una oportunidad para crecer y aprender.
El 27% de las compras en las tiendas proviene del efecto de sus escaparates en la gente y para eso están los Visual Merchandisers. Otras de sus funciones es analizar tanto el producto como las diversas formas de presentación, estudiando layout y display, estrategias de venta, nuevas aperturas y tendencias internacionales de retail.
Suzy Peta Menkes ha sido uno de los personajes más influyentes y reconocidos dentro de la industria de la moda, su trabajo se caracteriza por sus críticas francas, justas y honestas sobre la moda que van desde cubrir eventos de todo el mundo de alta costura hasta la búsqueda de nuevos talentos emergentes, tiendas nuevas y apoyo a los diseñadores. Fue periodista y editora para el diario International Herald Tribune, nació en el Reino Unido, estudio costura en Paris en los 60’s, y es ahi donde se dio cuenta que es mas fácil escribir sobre ropa que realmente hacerla. También estudió historia en Cambridge donde analizó los looks más allá de la tendencia y publicó varios libros sobre el estilo de la realeza británica The Royal Jewels (1985),The Windsor Style y Queen and Country (1992). Así como ella tú también te puedes especializar en esta rama y desarrollar una carrera competitiva estudiando Coolhunting, pues son las bases para poder entender la moda como un fenómeno social, cultural y económico.
Un editor de moda está a cargo de todo el contenido relacionado con moda, planea los contenidos de acuerdo con las fechas relevantes de la industria de la moda, eventos y lo último de las tendencias. Debe saber de arte, música, películas, cultura, y obviamente moda, para así generar contenidos más diversos y completos.
Un PR de moda se encarga lograr un mejor posicionamiento de marca, producto o servicio de moda, mediante estrategias para lanzamientos, mantenimiento del share of mind, re-posicionamiento de marca y manejo de crisis.
En la industria de la moda también se necesitan personas que tengan habilidades para manejar números, operaciones financieras, etc. De hecho es una de las profesiones más importantes dentro de la industria, pues los administradores son quienes llevan el control de las empresas; ¿te has preguntado quién hace los inventarios, las proyecciones de comercialización para una colección otoño- invierno, el presupuesto del lanzamiento de una marca, etc? Así que si a ti lo que te gustan son las matemáticas, entonces eres bienvenido para dirigir las áreas de producción, compra, venta, administración y contabilidad.
Un director debe saber planear, dirigir, administrar, vender, promover y fortalecer una empresa de moda mediante acciones que permitan planear y administrar un negocio exitoso enfocado a resultados.
Antes de elegir cualquiera de estas carreras es importante que seas muy objetivo a la hora de analizar tus opciones pues, aunque todas las habilidades del ser humano son perfectibles, todos nacemos con más talento para desarrollar ciertas tareas que otras, así que aprovecha tus competencias. Si ya estás seguro que quieres pertenecer a esta maravillosa industria pero aún no sabes por dónde comenzar, inscríbete a nuestro programa de Discovery Fashion Business e inicia un recorrido terórico- practico con la guía de tutores expertos.
Por María Fernanda Cisneros