La rebelión de las mujeres burguesas. Charlotte Casiraghi en Chanel Haute Couture SS 2022 como símbolo de la mujer rebelde.
El caballo y el caballero han sido símbolos de la esfera animal en el ser humano, la fuerza de los instintos, el caballero es el dominador, el logos, el espíritu que prevalece sobre la materia, es un humano superior a todos los demás, la ecuación del caballero fortifica el cuerpo, pero a la vez paralela y dominantemente, educa el alma y su espíritu, para permitirle un dominio y dirección adecuados del mundo real y una participación perfectas en las jerarquías del universo. 1
El caballo a su vez es un símbolo complejo no bien determinado, es la energía cósmica, es guerra, representa la fuerza del caos primigenio, los deseos exaltados, los instintos, también figura lo inconsciente y lo natural, en él se refleja el lado mágico del hombre.2
Por tanto, una mujer a caballo representa la rebelión de las mujeres burguesas, puesto que la mujer burguesa es un concepto unido al ámbito semántico del ocio, en su acepción de disfrute del tiempo libre, e igualmente vinculado a la dominación decimonónica discreta.
La mujer a caballo es la rebelión a la pasividad y debilidad inerte en el discurso patriarcal. Es una declaración pública y social, pues la mujer discreta y ociosa que parece apuntar hacia la pasividad se reivindica ante los mandatos aristocráticos sobre la vestimenta, el cuerpo, el ocio y el deporte; esta amazona entrelaza el mito, se revela ante la misoginia luchando por la imaginación y despertando la identidad de la mujer rebelde.
La mujer a caballo es representada casi siempre en negro, como suele representarse a la femme fatale o al tópico literario de la Virgo Bellatrix, una isla negra por colonizar. Así, Charlotte Casiraghi en un inconsciente colectivo símbolo de la mujer rebelde que en su esfera burguesa y aristocrática se rebela ante el aburrimiento y la pasividad patriarcal.
La mujer a caballo se convierte así en un ser humano al que se le permiten el dominio y dirección adecuados del mundo real y se le da participación perfecta en las jerarquías del universo.
Su aparición sobre la pasarela en el Grand Palais en el que por primera vez, CHANEL ha confiado a un artista contemporáneo la tarea de imaginar la puesta en escena de un desfile, Xavier Veilhan para CHANEL, evoca imágenes y nociones muy queridas por el artista: desde los recorridos ecuestres a los caninos.resulta en un gesto doblemente simbólico, el primero reivindicando la herencia histórica de la maison, la de su fundadora Gabrielle Chanel, quien de entre todas las grandes modistas y diseñadoras en la historia de la moda ligó el destino de su casa a los equinos, cuando por influencia de su amante Étienne Balsan, un polista consumado y más tarde Arthur “Boy” Capel, y ante la incomodidad de la moda encorsetada se rinde ante la indumentaria de los jinetes, la cual encumbró como uno de sus códigos, la unión de lo masculino y lo femeninio, un escándalo, un acto de rebeldía y subversión hacía los cánones burgueses de la época.
1.Diccionario de símbolos, Juan Eduardo Cirlot, Ediciones Siruela. 1997
2.-Historias rebeldes de mujeres burguesas (1790-1948) María Dolores Almazán Ramos. Temas Antropológicos. Revista Científica de Investigaciones Regionales, vol. 33, núm. 1, pp. 121-126, 2011. Universidad Autónoma de Yucatán
Montserrat Caballero es directora y fundadora de TALLER FDP. Investigadora, activista académica, emprendedora y directora creativa de proyectos publicados en medios especializados como La Tempestad, 192, Código, Harper’s Bazaar, Elle, ID, entre otros. Co-autora del libro Moda y Política: Encuentros místicos en la Ciudad de México (2015) y Pink-Cross Pollination en colaboración con el Museo del Fashion Institute and Technology de NYC (2019).
